ESTUDIA O NO ESTUDIAR

Columna de opinión aparecida en diario el Observador


“Me siento deprimida y sin ganas”, decía Tamara Antón este lunes al hacer la denuncia de lo que esta pasando con sus estudios en criminalistica. Tamara es alumna de segundo año de la carrera de criminilastica de la UTEM, ella al igual que miles de otros jóvenes han visto truncados sus sueños y adoloridos sus presupuestos familiares por una oferta universitaria extraña, sin claridades de ocupación y muy bien vendida.


No ha habido autoridad en el país que regule adecuadamente esto, no ha existido autoridad en el municipio que se ponga del lado de los estudiantes para defenderlos y ante esto, lo primero que queremos decir es que estamos junto aquellos jóvenes chilenos y viñamarinos que hoy sienten que fueron estafados, los apoyamos moralmente, pero también hemos iniciado la búsqueda de los dispositivos jurídicos que les permitirá resarcir sus derechos y reparar los daños que se les han provocado.

Ahora en el tema de fondo, es necesario apurar el tranco como país en la difusión de las normas de acreditación y apurar el tranco por parte de las autoridades actuales de educación por fiscalizar e informar de tal manera de prevenir que en marzo próximo otros miles de jóvenes inicien caminos dolorosos como el de Tamara.


En viña del Mar, “cuidada Universitaria” crearemos el defensor del vecino, organismo que tendrá por finalidad ponerse al lado de las y los viñamarinos cuando estos sientan que las grandes compañías o las grandes instituciones vulneran sus derechos, estaremos con los vecinos cuando se les cobre abusivamente una cuenta o cuando no se les tramite un derecho o un beneficio. El DEFENSOR VIÑAMARINO será un organismo dependiente del Alcalde y estará a disposición de facilitar la vida de los viñamarinos.


Esperamos que la universidades involucradas en este problema y las autoridades les den una solución pronta y real a los estudiantes, que no los sigan castigando con cobros para congelar, con Dicom y otras presiones que solo contribuyen a incrementar la rabia el dolor y la frustración de nuestros jóvenes viñamarinos.